¿Sabes qué es la larga cola?
Los viernes Marketing.
La larga cola (long tail en inglés) es un concepto que fue definido por primera vez por Chris Anderson en el que explica el funcionamiento de los modelos de negocio que se basan en el aprovechamiento de internet para conseguir un gran número de ventas de productos con muy poca demanda.
Esta entrada pertenece a la serie introductoria al Marketing para arquitectos e ingenieros que iniciamos con 5 acciones para conseguir clientes.
Como veremos a lo largo de este artículo no cabe duda que la llegada de internet a nuestra vida ha cambiado y cambiará por completo la mayoría de los modelos de negocio y que propicia la entrada de nuevos modelos. Internet provoca que ya no es necesario moverse únicamente bajo el dictado de las grandes compañías de distribución tanto de productos como de servicios.
Un ejemplo.
El ejemplo más gráfico que se suele utilizar es el del mundo discográfico. Imaginemos una tienda tradicional de discos de hace veinte años. Por muy grande que fuera el establecimiento era imposible que pudiera albergar la totalidad de la producción discográfica existente. El espacio era limitado y tenían que poner su esfuerzo en los discos con más “tirón” para vender el mayor número posible de unidades e incrementar su rentabilidad. La llegada de internet ha propiciado la posibilidad de poder disponer la práctica totalidad de la producción discográfica al servicio del consumidor y todo ello desde cualquier parte del mundo. Ahora tener en un catálogo un disco o incluso una única canción que produzca una única venta al año puede ser rentable. Eso es la larga cola. Eso es parte del éxito de iTunes.
El ejemplo anterior lo podríamos aplicar también a los libros. Tal vez de un ebook se venda un único ejemplar al trimestre, pero eso es suficiente. Si multiplicamos miles de ebook diferentes con ventas mínimas como el anterior podremos observar las posibilidades que tiene la larga cola.
El consumidor manda.
¿Cómo nos puede ayudar a arquitectos e ingenieros?
Imaginemos que somos expertos en el cálculo de estructuras de arcos de mampostería. En principio es un servicio que podemos suponer (yo diría que afirmar) que no tiene mucha demanda. Si hiciéramos un viaje en el tiempo a hace apenas veinte años seguramente podríamos desarrollar nuestra actividad de una manera modesta en el ámbito de la restauración, pero dado que la demanda es pequeña no está claro que pudiéramos subsistir únicamente con esa actividad (esto es un mero ejemplo, no es una afirmación). Estaríamos dentro del ámbito de los productos y servicios con poca demanda. Pues bien, desplacémonos al mundo actual. Esa pequeña demanda ahora no tiene barreras (geográficas, culturales,…), internet las ha eliminado. Seguro que hay poca demanda pero una persona que necesite un servicio de este tipo, y que incluso se encuentre a miles kilómetros de nosotros, puede hacer una búsqueda en internet de este servicio, localizarnos, ponerse en contacto con nosotros e incluso convertirse en un cliente. No despreciemos esta oportunidad que nos brindan las nuevas tecnologías. Un micronicho con escasa demanda puede convertirse en nuestra gran oportunidad.
La larga cola y el blog.
La larga cola ha ido perdiendo parte de su definición original y actualmente gana más fuerza su aplicación pura en el ámbito de internet y del posicionamiento natural. Ahí entra en juego el blog.
Como ya sabemos después de leer el artículo <<Marketing digital, ¿qué estrategia vas a seguir?>> donde hablábamos del posicionamiento natural SEO (te recomiendo que leas el artículo si todavía no lo has hecho), a la hora de realizar una consulta en un buscador de internet nuestra página aparecerá en los primeros puestos dependiendo de la optimización de la misma para determinadas palabras clave. En el caso de la larga cola esas palabras clave serían un producto muy demandado.
Si nuestro sitio web tiene integrado un blog en el que publicamos de manera regular y con cierta frecuencia, tendremos una producción de miles de palabras a lo largo del tiempo y provocaremos que se vaya posicionando poco a poco en un gran número de estas palabras de una relevancia menor, pero que con el tiempo harán que más y más personas lleguen a nuestra página sin ser necesario que lo hagan a través de las palabras clave que nosotros queremos posicionar. Asimismo estas palabras de menor relevancia suelen tener una competencia más pequeña y por ello es más fácil que nuestro sitio web se posicione con ellas. En definitiva, una palabra clave relevante podrá llevarnos más cantidad de tráfico a nuestra página pero miles de palabras de menor relevancia a la larga producirán un tráfico mayor hacia nuestra web.
Empieza ya con tu blog.
Después de lo que has leído anteriormente ya no tienes excusa para incluir en tu estrategia digital un blog. Busca tu nicho. Pregúntate de qué eres experto o qué te apasiona y comienza mañana mismo a confeccionar tu blog y a publicar dado que esto es una carrera de fondo y los resultados no se ven inmediatamente. Hay que seguir adelante día a día para ver los resultados a medio plazo.
Espero que te haya resultado interesante y me gustaría que aportaras un granito de arena y dejaras un comentario.
Muchas gracias por leer el artículo.
Arquitecto e Ingeniero Técnico de Obras Públicas